Cambios mayores en el ensayo, con divisiones y agregados. Antes de recién se veía así:
Duelo de ilusionistas. X es insincero y mentiroso, pero transparente. No existe lo evidente; existe lo que una ilusión propicia te hace ver.
— el Zambullista (@zambullista) diciembre 2, 2015@zambullista "No se puede hacer más obvio", diría René Lavand. "El viejo truco de pasarte un elefante por atrás", diría Maxwell Smart.
— el Zambullista (@zambullista) diciembre 13, 2015Un lobo se disfraza de cordero apenas pegándose un bigote de lana. Los corderos que le creen tienen alta necesidad o altas ganas de creerle.
— el Zambullista (@Zambullista) diciembre 23, 2015@Zambullista Si es alta necesidad, desean tan poco como salir del infierno. Si son altas ganas, desean tanto como conquistar ciertos cielos.
— el Zambullista (@Zambullista) diciembre 23, 2015@Zambullista Hay una ilusión abrazada por desesperación y otra por ambición. La víctima de la 1ª despierta más solidaridad que la de la 2ª.
— el Zambullista (@Zambullista) diciembre 23, 2015@Zambullista Porque sos menos dueño –menos libre– de creerle al lobo disfrazado si lo hacés por desesperación que si lo hacés por ambición.
— el Zambullista (@Zambullista) diciembre 23, 2015Lo razonable es un campo de probabilidades medias o altas, no bajas. No puede ver venir gallinas que ponen un zorro a cuidar el gallinero.
— el Zambullista (@Zambullista) diciembre 28, 2015Una cosa es que la decisión de poner al zorro venga de la casa del granjero y otra es que venga del gallinero. Pero el resultado no cambia.
— el Zambullista (@Zambullista) diciembre 28, 2015La estupidez política es un lujo que pagás más caro cuanto más pobre sos, como todo lujo. El zonzómetro es un botín a disputar, no un dogma.
— el Zambullista (@Zambullista) diciembre 28, 2015Ahora se ve así:
1.
Duelo de ilusionistas. X es insincero y mentiroso, pero transparente. No existe lo evidente; existe lo que una ilusión propicia te hace ver.
— el Zambullista (@zambullista) diciembre 2, 2015@zambullista "No se puede hacer más obvio", diría René Lavand. "El viejo truco de pasarte un elefante por atrás", diría Maxwell Smart.
— el Zambullista (@zambullista) diciembre 13, 2015Un lobo se disfraza de cordero apenas pegándose un bigote de lana. Los corderos que le creen tienen alta necesidad o altas ganas de creerle.
— el Zambullista (@Zambullista) diciembre 23, 2015@Zambullista Si es alta necesidad, desean tan poco como salir del infierno. Si son altas ganas, desean tanto como conquistar ciertos cielos.
— el Zambullista (@Zambullista) diciembre 23, 2015@Zambullista Hay una ilusión abrazada por desesperación y otra por ambición. La víctima de la 1ª despierta más solidaridad que la de la 2ª.
— el Zambullista (@Zambullista) diciembre 23, 2015@Zambullista Porque sos menos dueño –menos libre– de creerle al lobo disfrazado si lo hacés por desesperación que si lo hacés por ambición.
— el Zambullista (@Zambullista) diciembre 23, 20152.
La ambición mata al ratón. Resucita en un piojo que va por lana y vuelve trasquilado. Un quemado que ve una vaca y llora le dice: —Te avisé.
— el Zambullista (@Zambullista) enero 11, 2016
—¿Qué le avisaste? –se mete un gato y le cuesta 1 vida. —¿Y cómo morí? —Eso es harina de otro costal. El tema era el ratón. Y le cobra otra.
— el Zambullista (@Zambullista) enero 11, 2016
La ambición mató al ratón, que fue por lana y no volvió (ni siquiera trasquilado): justo eligió a un lobo disfrazado, que le hizo de gato.
— el Zambullista (@Zambullista) enero 10, 2016
3.
Si hay luz, usar flash para sacarle a la cancha desde la tribuna es una estupidez inocua. En las peores te perjudicás creyendo beneficiarte.
— el Zambullista (@Zambullista) enero 10, 2016
La estupidez política es un lujo que pagás más caro cuanto más pobre sos, como todo lujo. El zonzómetro es un botín a disputar, no un dogma.
— el Zambullista (@Zambullista) diciembre 28, 2015Lo razonable es un campo de probabilidades medias o altas, no bajas. No puede ver venir gallinas que ponen un zorro a cuidar el gallinero.
— el Zambullista (@Zambullista) diciembre 28, 2015Una cosa es que la decisión de poner al zorro venga de la casa del granjero y otra es que venga del gallinero. Pero el resultado no cambia.
— el Zambullista (@Zambullista) diciembre 28, 2015Peor que cometer es persistir en un error, porque se dobla la apuesta. Ej: se pide paciencia para el zorro que ataca el gallinero que cuida.
— el Zambullista (@Zambullista) enero 8, 2016
4.
Lobo suelto, cordero atado. Un zorro cuidando gallinas y un perro el asado. Lo desigual acorta el duelo. No hay desenlaces más previsibles.
— el Zambullista (@Zambullista) enero 23, 2016
El cordero no soltó al lobo y se ató. En cambio, existen gallinas que eligen un zorro de cuidador y asadores que eligen un perro. Hegemonía.
— el Zambullista (@Zambullista) enero 23, 2016
Hacérsela fácil al poderoso y difícil al débil agrava la desigualdad. Y si lo hace el débil, lo otro agravado ahí es la estupidez política.
— el Zambullista (@Zambullista) enero 23, 2016
Si las 3 fábulas nacieron como hipérboles caricaturescas, el aumento de la indefensión metaforizada ya las convirtió en retratos realistas.
— el Zambullista (@Zambullista) enero 23, 2016
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