Finalmente hice la aclaración tan demorada de que en esa lista no está la crítica que hace juicios de valor. Antes decía así:
1.
Consideremos el análisis de un cuento o de una novela, de algún relato en sentido general. La necesidad de decir algo sobre eso que hemos leído define, de mínima, el trabajo a realizar.
Ahora dice así:
1.También agregué esto después de "...visión alternativa de la otra", que era donde terminaba la penúltima sección:
Consideremos el análisis de un cuento o de una novela, de algún relato en sentido general. Recién empiezo y ya repito: un análisis, no un juicio de valor sobre el relato, desde demoledor a elogioso. Ni en vez de un análisis ni como corolario del que se haga hay una opinión sobre cómo valorar lo leído y/o cómo reaccionar, qué sentir. Hay sólo un análisis en la crítica de la que hablaremos. En esta estamos con Pierre Menard, que «declaraba que censurar y alabar son operaciones sentimentales que nada tienen que ver con la crítica».
La necesidad de decir algo sobre eso que hemos leído define, de mínima, el trabajo a realizar.
Puentes así son los que va haciendo un análisis (y, de hecho, la inteligencia misma). (En toda metáfora hay un análisis así, imperceptible de tan abreviado; por ejemplo, recién metaforicé ese «signo de equivalencia» –que también es una metáfora– con un «puente» –también– que permite ir de una a otra «visión» –también–, que es lo que es ser alternativas.)